El Gesto Eterno
Video 4k
71min
2024
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Un largometraje a medio camino entre el documental sensorial, la videodanza y las películas de detectives; acompañada de diferentes gestos escultóricos que esbozan una escenografía y arquitectura fugaz en el espacio expositivo. El proyecto se dirige hacia la tensión entre lo efímero y la trascendencia presentes en la arquitectura y en la danza, entre la piel y el cemento: el cuerpo frente a la ciudad escenario.
En la película seguimos la historia de un bailarín convertido en detective, que se embarca en la búsqueda de las huellas casi borradas del movimiento artístico (dancístico, plástico y sonoro) de la Morforcromofonía y su creador, un excéntrico y visionario arquitecto, Alfonso Pallares, que tuvo una gran influencia en la arquitectura modernista mexicana e internacional, aunque por diversas razones nunca se le nombraba.
A pesar del olvido, el descrédito, la quema de sus documentos en una hoguera y lo efímero de su propuesta se trae a la vida el movimiento artístico a través de la recreación de una coreografía y arquitectura sinestésica. Esta se inspira en gestos espaciales, partituras de colores, dibujos musicales y ruidos arquitectónicos que tratan de materializar y evocar la presencia y pensamiento de Alfonso. Se busca esta materialidad en documentos que sobreviveron a la quema, así como en su legado existente en la obra de terceros: Se rastrean determinado elementos arquitectónicos y modos de hacer de arquitectos posteriores que tuvieron un contacto cercano con él y que retoman ideas que tienen su semilla en esta teoría, como pueden ser el uso del color y la luz en la obra de Luis Barragán, la idea de Ciudad Cuerpo que rescata Le Corbusier, o la concepción de Ciudad Escenario en Pedro Ramirez Vázquez, entre otros.
A través de esta narrativa fílmica y escenográfica se señala el conflicto que existe entre un arquitecto que quiso ser fugaz, y el empeño de un artista en materializar su presencia.
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71min
2024
Un largometraje a medio camino entre el documental sensorial, la videodanza y las películas de detectives; acompañada de diferentes gestos escultóricos que esbozan una escenografía y arquitectura fugaz en el espacio expositivo. El proyecto se dirige hacia la tensión entre lo efímero y la trascendencia presentes en la arquitectura y en la danza, entre la piel y el cemento: el cuerpo frente a la ciudad escenario.
En la película seguimos la historia de un bailarín convertido en detective, que se embarca en la búsqueda de las huellas casi borradas del movimiento artístico (dancístico, plástico y sonoro) de la Morforcromofonía y su creador, un excéntrico y visionario arquitecto, Alfonso Pallares, que tuvo una gran influencia en la arquitectura modernista mexicana e internacional, aunque por diversas razones nunca se le nombraba.
A pesar del olvido, el descrédito, la quema de sus documentos en una hoguera y lo efímero de su propuesta se trae a la vida el movimiento artístico a través de la recreación de una coreografía y arquitectura sinestésica. Esta se inspira en gestos espaciales, partituras de colores, dibujos musicales y ruidos arquitectónicos que tratan de materializar y evocar la presencia y pensamiento de Alfonso. Se busca esta materialidad en documentos que sobreviveron a la quema, así como en su legado existente en la obra de terceros: Se rastrean determinado elementos arquitectónicos y modos de hacer de arquitectos posteriores que tuvieron un contacto cercano con él y que retoman ideas que tienen su semilla en esta teoría, como pueden ser el uso del color y la luz en la obra de Luis Barragán, la idea de Ciudad Cuerpo que rescata Le Corbusier, o la concepción de Ciudad Escenario en Pedro Ramirez Vázquez, entre otros.
A través de esta narrativa fílmica y escenográfica se señala el conflicto que existe entre un arquitecto que quiso ser fugaz, y el empeño de un artista en materializar su presencia.
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